martes, 14 de diciembre de 2010

QUÉ GANAS DE CAMBIARME EL APELLIDO!!!

Algún antepasado mío tuvo a bien esparcir su oligofrénica semilla por todo el globo terráqueo, lo que ha propiciado que más de algún o alguna den mi dirección de correo electrónico como la suya propia. En la lista están dos gringos, una costarricense y un peruano. Los gringos son más bien inocuos. Una tal Sheila, que se inscribe a varias cosas de esas que te llegan a la carpeta de SPAM y un estudiante de universidad del que me llegó, en inglés, el aviso de que le faltaban datos y, por jocosa y por la weba de contestar en el mismo idioma, les respondí en español que al joven en cuestión igual le hacía falta un curso previo al que pretendía tomar en el que le enseñaran cómo usar correctamente el correo electrónico. Poca lata han dado los gringos, la verdad.

La costarricense es una mujer que trabaja para el gobierno de Costa Rica. Se llama Silvia y, aunque he recibido varios correos dirigidos a ella, la verdad es que ha resuelto el tema con bastante diligencia. Todo hay que decirlo, intenté acojonarlos haciéndoles saber que estaban ventilando asuntos de gobierno ante un desconocido que nada tiene qué ver con ellos.

El peor de todos es el peruano. Y que conste que no tengo nada en contra de Perú ni de su gente. Sólo conozco a este individuo y, aunque la muestra no es representativa, no deja de ser lamentable. Se llama Sergio y fue el primero en aparecerse en mi bandeja de entrada, hace MÁS DE UN AÑO. Desde entonces me ha llegado de todo: resultados de análisis clínicos, proyectos de trabajo, mensajes estúpidos “enviados desde mi Blackberry” (manda webos que sepa usar un cacharro de esos y no consiga usar bien el correo electrónico!!!), cotizaciones para comprarse un BMW, suscripciones a MAPFRE Perú y, lo último, un “amable recordatorio” de que tiene una deuda vencida que, por lo visto, no ha hecho intentos de pagar y que inicia el 14 de abril y se extiende hasta diciembre. Si tarda en pagar lo mismo que tarda en arreglar el tema del correo electrónico, estos incautos no van a cobrar en la p... vida!!!

Al principio intenté amable y educadamente que el señor en cuestión hiciera lo pertinente para dejar de molestarme con sus asuntos, pero pasados los meses y llegados cada vez más mensajes empecé a perder la paciencia y comencé a usar términos como la oligofrenia para referirme a él ante quienes insisten en escribirle a mi cuenta de correo. La verdad es que, ante la desesperación, ya fue lo único que se me ocurrió para que el interfecto en cuestión ponga de una vez y por todas una solución efectiva. Pero no hay manera. Sigo recibiendo correos dirigidos a él y me está causando tal cabreo que ha originado en mí unas ganas inmensas de cambiarme el apellido.

Con estas cosas, dan ganas de hacer una legislación universal en la que se hagan “exámenes” a la gente, a fin de determinar si tienen el suficiente coeficiente intelectual para usar herramientas como el correo electrónico y, de no ser así, prohibirles rotundamente el acceso a dicha herramienta.

Nunca he hecho propósitos de año nuevo, pero si pudiera, el de este año sería no volver a saber de él en mi vida!!!

Un besito a los que tienen apellidos raros. Dos a quienes, como yo, tienen que soportar homónimos oligofrénicos y testarudos.

6 Kalimotxos:

Anónimo dijo...

Mere... y mi papá que tanto me insistió -cuando enviudé- que les cambiara el apellido para que fuera como el mío: Arriola Guevara. A mí nunca me ha sucedido eso... ¡Ustedes eran sus nietos favoritos, pues! y quería que se apellidaran como él...

Suza dijo...

Pues en este momento no veas las ganas que tengo de que le hubieras hecho caso!!! >_<

Mexiñol dijo...

No creas, yo tengo apellido raro y un par de veces me han llegado correos, eso si, al final el receptor resultó ser un pariente lejano residente en Argentina

Arby dijo...

jajajaja, ay Susy! y si le hubieran hecho caso a tu abuelo, ahorita estarías peleando también porque le escriben a tu mamá a tu msn, o porque estaríamos preguntando: "¿Susana chica, o grande?", jajajaja.
Los nombres en muchos casos dan problemas; si es largo o corto, raro o común, con "v" o con "b",con/sin "h", etc.
atte. Arbitrariedad (jajajaja, ¿lo ves?)

Unknown dijo...

Hay Bupercia, yo se por lo que estas pasando, es un dolor de cabeza. Yo lo arreglé bombardeando el correo del idiota con mensajes de que dejara de dar mi correo. Descargate un programa que se llama MaxBulkMailer para mac, o si prefieres mándame la dirección del deficiente mental, el mensaje que le quieras enviar y yo le saturo su inbox con unos 200 mails diarios, a ver si así se pone las pilas y deja de molestar.

Diego

Suza dijo...

Querida prima: Lo de los apellidos nada tiene que ver con lo que dices que ocurriría, porque de hecho ocurrió durante toda mi vida en México. =P

Pero me gustó tu nuevo apodo, aunque me sigue gustando más "Sociedad". xD

Dieguín: No tengo Mac. Pero agradezco el detalle de la oferta. Si se llega a dar el caso ya te contaré en privado. =)

Gracias a todos por el apoyo!

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